AUTOR:
MANUEL
ALBERTO RIVEROS MEDINA.
Licenciado en Educación Física de
Docente Universidad Pedagógica
Nacional. Facultad Educación Física
Docente Biomecánica y Anatomía
Funcional. Universidad Santo Tomas de Aquino. Facultad de Cultura Física.
Correo electrónico: manuelalbertoriverosm@gmail
El
presente artículo busca mostrar la importancia de la reeducación propioceptiva en el futbolista como factor
fundamental para la prevención de lesiones, la pronta recuperación y la disminución de los niveles de reincidencia de la misma, además, de contribuir al
mejoramiento de la capacidad cinética del individuo de acuerdo a las demandas específicas
del deporte.
Por otra parte se muestra como el
Fisioterapeuta se convierte en motor
principal para la planificación y control de programas de reeducación
propioceptiva de acuerdo a las necesidades individuales del futbolista, desarrollándolas progresivamente a través de etapas especificas.
PALABRAS CLAVES:
Deporte, fútbol, propiocepciòn, entrenamiento,
fisioterapeuta.
El deporte evoluciona constantemente,
lo cual exige la mejora continúa del
rendimiento, donde se estimulan no solo factores de tipo social, sino también
psicológico anatómico y funcional.
En el fútbol caso específico del presente artículo hace referencia a que
“los nuevos sistemas de juego y el actual modo de entenderlo, a partir de las modificaciones técnicas y a
la constante introducción del deporte en las Ciencias Biológicas, requieren
unas capacidades de rendimiento elevadas. (1) además, de la interacción de los diferentes sistemas corporales
(músculo esquelético, nervioso, cardiaco y pulmonar) que conducen al logro del
objetivo, reflejado en la competencia.
En los deportes de conjunto como en el
fútbol, “la habilidad técnica y táctica del jugador son un factor indispensable
para una realización concreta y real del
juego mismo. La habilidad motora y la inteligencia neuromuscular, mediante la
regulación plástica del sistema nervioso, se concretan y se realizan
prácticamente gracias a adaptaciones de naturaleza cognitiva y perceptiva que
se manifiestan en el terreno de juego bajo formas de respuestas espacio-temporales y
modificaciones cinéticas. De igual forma, la realización del gesto técnico
resulta de una simplicidad y plasticidad tal en su manifestación que transforma
en arte figurativo una trascripción biomecánica gobernada por leyes cibernéticas”.
(2)
Por lo tanto, el fútbol como deporte
requiere para su total desarrollo de una serie de elementos tanto fisiológicos
como cinéticos donde se deben ubicar las cualidades físicas básicas y
complementarias (fuerza, resistencia,
velocidad, flexibilidad; coordinación, equilibrio, velocidad de desplazamiento
y reacción, movilidad) al igual que los patrones básicos de movimiento (PBM),
como caminar correr, saltar, patear, lanzar y combinaciones de estos, a los cuales también se suman otras actividades
motoras típicas de este deporte como son: desplazamientos en diferentes direcciones desplazamientos con aceleraciones
desde quietud o movimiento y desaceleraciones; cambios de dirección (acciones
repentinas de movimiento) con sus
virajes y fintas, ejecutadas estas, con diferentes ritmos y mediadas ya sea por
la voluntad propia o de acuerdo a las circunstancias momentáneas y cambiantes
del juego como por ejemplo: factores externos en los que se destaca el
compañero, el adversario o como en el caso del salto, la brevedad del tiempo de preparación de
este, la no elección del momento del salto, el no estar en la posición adecuada
para la ejecución, entre otras.
Unido a lo anteriormente expuesto, la
necesidad del futbolista de ejecutar las tareas de movimiento especificas de su
deporte dentro de una alta exigencia donde las características cualitativas del
movimiento ( precisión, amplitud, fluidez y ritmo) son expuestas dentro de un
marco de juego intenso, dinámico, cambiante y de gran exigencia convirtiéndolo
en una practica compleja que requiere el
desarrollo máximo de sus cualidades físicas sincronizadas con habilidades y destrezas especificas
propias de dicho deporte.
Para que dichas acciones fisiológicas y
cinéticas se den adecuadamente debe
existir una interacción entre el sistema de palancas que conforma el cuerpo
humano y en el cual los músculos, huesos y articulaciones actúan conjuntamente
con un regulador como es el sistema nervioso facilitando la transmisión de
impulsos aferentes y eferentes, regulando y estableciendo una armonía en el
control del movimiento; donde también juega un papel fundamental el sistema
propioceptivo del futbolista ya que constituye una de las bases aferentes más
importantes para la creación de un engrama de movimiento efectivo y ajustado a
los requerimientos del fútbol; de lo contrario la deficiencia o alteración de este sistema podrá ser un factor de riesgo importante de lesión osteomuscular.
Tomado
de FIFA.com. 2006
Al ser la
propiocepción una función fundamental del sistema nervioso se hace necesario hacer
referencia al mismo, por lo tanto:
EL
SISTEMA NERVIOSO
El sistema nervioso es el
centro de regulación y la red de comunicaciones del cuerpo, y cumple con tres funciones generales:
1.
Sensorial, con la cual detecta los cambios del propio cuerpo y del medio
externo
2. Integradora,
interpreta la información captada
3. Motora, con esta
responde a la interpretación mediante acciones consistentes en contracciones
musculares o secreciones glandulares.
Gracias a estas tres funciones el
sistema nervioso es el medio más rápido de que dispone el organismo para el
mantenimiento de la homeóstasis.
En el hombre las modificaciones del
medio ambiente o del propio organismo son fuente de múltiples y diversos
estímulos que actúan sobre órganos receptores que de acuerdo a la naturaleza
del estimulo, llegan a centros que permiten su conocimiento y discriminación.
La sensación, es decir, el fenómeno producido por la acción de un estímulo
sobre un órgano receptor es el que le permite al organismo conocer.
Las sensaciones pueden dividirse en:
1.
Superficiales: tacto, dolor,
temperatura.
2.
Profundas: que corresponden a la
posición muscular y articular (propiocepción),
al dolor muscular profundo y a la vibración.
3.
Corticales: correspondientes a
la esterognosia, grafestesia, barognosia, etc.
Además existen receptores sensoriales, los cuales son
células especializadas que registran cambios particulares en el medio ambiente
y se clasifican en:
1. Exteroceptores:
responden a cambios sucedidos en el
medio ambiente.
2. Interoceptores:
responden a cambios en los tejidos viscerales, de los vasos sanguíneos y
cambios químicos.
3. Propioceptores: regulan
el tono postural y la acción muscular
DEFINICION
Y FUNDAMENTOS DE LA
PROPIOCEPCION
La propiocepción es un tipo de sensación profunda que se da
a partir de la recepción de estímulos dados por los receptores musculares,
tendinosos y articulares denominados propioceptores (huso neuromuscular, órgano
tendinoso de Golgi, receptores articulares tipo I,II,III,IV) que están
enmarcados dentro de la función sensorial del sistema nervioso.
La propiocepción corresponde al sentido cinestésico, es
decir, confiere al aparato neuromuscular retroalimentación de la rapidez,
dirección y dinámica del movimiento, pero también, del sentido de la posición
estática que significa la orientación consciente de las distintas partes del
cuerpo con relación a las otras.
Mountcastlle y Willis (5) definen la propiocepción como la
conciencia de la posición de las extremidades y la cinestesia como la
conciencia del movimiento de las articulaciones.
Sherrington (6) describe la propiocepción como un sentido
que incluye sensaciones vestibulares e información de los músculos y las articulaciones que no
tienen que ser percibidas necesariamente.
Scott Lephart (7) la
define como una variación especializada de la modalidad sensorial del tacto,
que abarca las sensaciones de movimiento (cinestesia) y la posición de las articulaciones
(sentido de posición de las articulaciones)
Por lo tanto, la propiocepción es
la habilidad del cuerpo para responder a un estimulo externo a través de
ajustes musculares reflejos, observados en respuestas espacio-temporales y
modificaciones cinéticas, mediados por mecano-receptores (receptores
articulares y musculares) que contribuyen al ajuste del control neuromuscular y
por ende a la generación de engramas de
movimiento efectivos y ajustados a las necesidades del individuo; Ya sea para el
funcionamiento articular o para la modulación de la función muscular.
La propiocepción es fundamental para el futbolista, pues la
exigencia motriz y física de su accionar en el campo, más la diversidad de
estímulos generados por las circunstancias momentáneas y cambiantes del juego
llevan a que esté sea un factor básico para las altas demandas cinéticas del
fútbol, convirtiéndose en facilitadora
de la tarea motriz eficiente ó por el contrario su alteración ó deficiencia en
una promotora de la lesión del deportista.
En el fútbol los miembros inferiores son el eje principal
de la actividad, juegan un papel
fundamental en la técnica deportiva, a la vez que cumplen con dos funciones
importantes en la homocinética que son: el soporte de peso corporal y la locomoción. Para que estas funciones se den adecuadamente
se requiere cumplir con todas las cualidades anatomo-funcionales y biomecánicas del pie y de los miembros
inferiores, además, de una buena integración del sistema propioceptivo como
receptor de la información externa de posición y movimiento que le permite dar
respuestas cinéticas de adaptación a los estímulos externos, por ejemplo en el
caso especifico del pie con su triple cometido:
1.
Como órgano de soporte del cuerpo en la marcha, carrera y salto.
2.
Como palanca que permite elevar e impulsar el
cuerpo (acción propulsora).
3.
Como
amortiguador y equilibrador de las fuerzas que actúan sobre sí mismos.
(8) (9)
De acuerdo con lo anteriormente expuesto, es
importante que el futbolista realice un
entrenamiento propioceptivo dirigido por el FISIOTERAPEUTA, de manera que
contribuya a dar respuesta adecuada a las altas demandas cinéticas a que se ven
sometidos sus miembros inferiores y por otra parte cumplir con los dos
objetivos principales de la rehabilitación deportiva como son la prevención de
lesiones y el retorno pronto y seguro del deportista a su actividad, en
condiciones iguales o mejores a las presentadas antes de la lesión.
Para generar el programa de entrenamiento propioceptivo
para futbolistas se debe hacer énfasis en sus miembros inferiores teniendo
también en cuenta la influencia del sistema nervioso central en las actividades
motoras a través de tres niveles diferentes de control motor (nivel espinal,
tallo encefálico, SNC donde se incluyen la corteza motora, los ganglios basales
y el cerebelo). (10) (11)
En el primer nivel se emiten patrones de movimiento a
partir de los reflejos que contribuyen a generar la fijación refleja (ajuste
muscular reflejo), durante condiciones de tensión superior a la que
habitualmente se presentan en la articulación, Además los husos neuromusculares
cumplen una importante función en el control del movimiento muscular ajustando
la actividad de las motoneuronas
inferiores; por consiguiente, en este nivel las actividades a realizar deben propiciar la estabilización
refleja ó dinámica de la articulación, es decir actividades súbitas ó
imprevistas de la posición articular.
El segundo nivel de control motor esta ubicado en el tallo encefálico en donde
se busca que los Propioceptores articulares y los centros vestibulares en los oídos (utrículo,
saculo y canales semicirculares superior, externo y posterior) y de los ojos (conos y bastoncillos),
mantengan la postura y el equilibrio corporal.
Las actividades a desarrollar para estimular este nivel corresponden a
ejecuciones de postura y equilibrio con ó sin información visual.
El tercer nivel, el más elevado de la función del sistema
nervioso central, está mediado por la conciencia cognoscitiva de la posición y
el movimiento corporal. A este nivel se inician y se programan engramas motores
para movimientos de carácter voluntario y consciente, que bajo la estimulación
se convertirán en inconscientes en el programa motor (destreza). (12) (13)
Por lo tanto, lo que se busca fisiológicamente con el programa de
entrenamiento propioceptivo para
futbolistas es entrenar las vías aferentes (alteradas o no), y así lograr un aumento
de la sensación de movimiento y posición articular a nivel de miembros
inferiores, a través de actividades o tareas de movimiento que serán
programadas o planificadas sobre la base de los principios del entrenamiento
deportivo. (14)
ACTIVIDADES O TAREAS DE MOVIMIENTO
I ETAPA
Se proponen tareas de restablecimiento de la estabilización
dinámica de la articulación, equilibrio y conciencia propioceptiva a través de
actividades de soporte y transferencia de peso, sobre diversas superficies
estables (blandas y duras entre las cuales se pueden encontrar arena, grama, etc.),
posteriormente se debe acceder a superficies inestables; se realiza ascenso y
descenso de rampas y escaleras hacia adelante y atrás; se realiza soporte
bipedal evolucionando hacia monopedal
con ojos abiertos y posteriormente cerrados.
También se ejecutan
actividades de marcha donde los desplazamientos se harán anteriores,
posteriores, laterales y diagonales; luego se realiza trote con desplazamientos
antero-posteriores y laterales, con o sin balón (conducción). En esta fase en
las actividades de soporte y transferencia de peso en miembros inferiores se
pueden sumar tareas de movimiento que involucren los miembros superiores con lo
cual se aumenta el grado de dificultad del ejercicio y por ende el beneficio
será mayor.
Tomado de FIFA.com. 2006
II
ETAPA
Esta etapa es más dinámica y complementando las tareas de
transferencia y soporte de peso se añaden actividades que impliquen
desplazamientos en diferentes direcciones, con cambios de dirección
(movimientos intempestivos virajes, fintas), aceleraciones desde quietud y movimiento y
desaceleraciones. Se realizan estas
tareas simulando movimientos propios de la acción de juego; de acuerdo a la
posición en la cual se desempeña el futbolista en el campo.
Para ello se puede
hacer uso de diferentes elementos como conos, aros, lazos, balones medicinales, pantalones de
carga, paracaídas, para las actividades de desplazamiento en diferentes
direcciones y ejercicios de movimientos combinados (posteriormente coordinación). Por otra parte
se comienzan a generar combinaciones de los patrones de movimiento específicos
del fútbol (caminar, correr, saltar, patear, lanzar y atrapar con el pie-
recepción o control del balón).
Así mismo es importante evolucionar en el ascenso y
descenso de rampas y escaleras con aumento de la velocidad de desplazamiento; y
continuar haciendo uso de superficies como la arena, el prado, espuma e
incorporando elementos de la fundamentación técnica como recepción del balón
con diferentes partes del cuerpo, conducción, pase y remate, todas a modo de
dominio del gesto técnico y no con las características especificas de la
competencia. Por ultimo se inician trabajos pliométricos con la modalidad de
multisaltos y de acuerdo a la capacidad del deportista se inicia trabajo de pliométricos con obstáculos a una altura
de 15 a
30 cms.
Tomado de FIFA. Com. 2006
III
ETAPA
Esta etapa hace énfasis en el desarrollo de actividades específicas
del fútbol teniendo en cuenta si sé esta desarrollando un proceso preventivo o
de rehabilitación en el cual se estarían ejecutando tareas denominadas de
retorno a la práctica deportiva.
Las tareas de movimiento deberán contener una mayor
intensidad y a la vez mayor velocidad en los desplazamientos y cambios de
dirección (trabajo de espejo, acciones ofensivas y defensivas), en las
aceleraciones y desaceleraciones, en el manejo del centro de gravedad de
acuerdo a la necesidad técnica.
Los patrones de movimiento deben ser ejecutados en acciones
de juego con uno o varios compañeros, con énfasis en situaciones momentáneas o
variables (brevedad en el tiempo de preparación de la respuesta motriz, no
posibilidad de elección del momento de respuesta, inicio de respuesta desde
posiciones no adecuadas para dicha respuesta – ajustes de movimiento de acuerdo
a las necesidades, intervención de diversos factores externos que dificultan la
tarea.
Se enfatiza en la técnica deportiva con tareas específicas
de remate, centros, pase, regate, movimientos específicos de acciones
defensivas y ofensivas; las cuales podrán ser ejecutadas con balón o sin balón,
con adversario o sin él.
La velocidad en esta etapa debe ser casi normal, el
entrenamiento pliométrico aumenta de
acuerdo a las capacidades del futbolista.
IV ETAPA
En esta etapa el futbolista deberá realizar actividades funcionales
específicas del fútbol de un modo controlado, la velocidad e intensidad de las
tareas estarán determinadas por la capacidad motora y física del atleta, su
estabilidad funcional, su confianza, además se deberá insistir sobre la
integración de ejercicios específicos y la programación de actividades de
rendimiento.
Tomado de FIFA.com.2006
En la IV
etapa se perfecciona el programa de entrenamiento propioceptivo por lo cual se
requiere del análisis apropiado de las necesidades de rendimiento del futbolista
y tener en cuenta las características especificas de sus funciones en el campo
de juego. (15) (16) (17)
CONCLUSIONES:
Por lo tanto, se debe hacer énfasis en que la reeducación
propioceptiva es fundamental en todo proceso de entrenamiento preventivo ó
asistencial no solo en el futbolista, también en las demás disciplinas
deportivas, con está se disminuye el riesgo de lesión y la reincidencia de la misma posterior a la rehabilitación. Deben tenerse en cuenta las características
individuales, el tipo de deporte o
ejercicio practicado el nivel de
entrenamiento y sobre todo la progresión del mismo facilitando así fenómenos de
adaptación a estímulos externos de manera que las respuestas de estabilización
dinámica sean eficientes. Por consiguiente, el Fisioterapeuta tiene una gran
responsabilidad frente al mantenimiento y/o mejoramiento de la reeducación
propioceptiva.
El Fisioterapeuta deberá concebir y ejecutar actividades
creativas y técnicas que dinamicen el proceso de entrenamiento propioceptivo,
teniendo además, en cuenta que la lúdica representa un elemento importante
dentro de este proceso y que la eficacia del programa propioceptivo especifico
al deporte depende de que el Fisioterapeuta conozca y entienda las necesidades
propias del deporte, del deportista y la patología del atleta.
Tomado de FIFA.com. 2006
BIBLIOGRAFÍA
1. BOSCO, C. Aspectos
fisiológicos de la
Preparación Física del Futbolista. 2ª. Edición, Barcelona,
Editorial Paidotribo.
2. BOSCO, C. Aspectos
fisiológicos de la
Preparación Física del Futbolista. 2ª. Edición, Barcelona,
Editorial Paidotribo.
3. CSANADI, A. El
Fútbol. 3ª. Edición. Pgs 23 a 28. Barcelona. Editorial
Planeta S.A.,1984.
4. MEINEL, K.
Didáctica del movimiento. 1ª. Edición. La Habana. Editorial
Pueblo y Educación. Páginas 115 – 204.
5. MOUNT CASTLE
VS: Medical Physiology. Ed. 14,
St Luis, 1980, Mosby.
6. SHERRINGTON CS:
On the propioceptive system, especially in its reflex aspects, Brain, 29. Páginas 467-482,
1906.
7. PRENTICE, W,
Técnicas de Rhb en la
Medicina Deportiva. 1ª. Edición. Barcelona. Editorial
Paidotribo. Páginas 138-157.
8. ZINTL, FRITZ.
Entrenamiento de la resistencia. 1ª. Edición. Barcelona. Editorial Martínez
Roca. 1991. Páginas 15-30
9. ALVAREZ DEL
VILLAR, C. La preparación física del fútbol basada en el atletismo, 3ª.
Edición, Madrid, Editorial Gymnos, 1992. Páginas 93-100.
10. ANDRWES J,
Physical Rehabilitation of the injured atlete, 2ª. Edición. Alabama. Editorial Mosby. Páginas 139-156.
11. GOULD, J.
Orthopedic and sports physical therapy. 2ª. Edición. St. Louis . Editorial Saunders. 1990. Páginas
49-61.
12. KANDEL, E SCHWARTZS , J. Principles of neural sciencie. 3ª. Edición.
Connecticut. Editorial Appleton y Lange, 1991.
13. DOWNIE, P.
Neurología para fisioterapeutas. 2ª. Edición. Buenos Aires. Editorial Médico
Panamericana. 1993.
14. GUYTON, A. Tratado
de Fisiología Médica. 8ª. Edición. Madrid. Editorial Mc Graw Hill. 1991.
Páginas 497 – 514, 529 – 540.
15. LASKOWSKI, E.R.
Rehabilitación perfeccionada con entrenamiento Propoceptivo. The physician
and sport medicine.
16. LEPHART, S.M.
Propioception of the ankle and knee, sports medicine, 25 (3). 1998. Páginas
149-155.
EXCELENTE ARTICULO!!
ResponderEliminarCada día mas orgullosa de tenerlo como mi docente :)